Mañana cuando despiertes
Daiana Henderson
Tengo mi cabeza en tu hombro
estoy de costado, vos no, y mi brazo
cruza diagonal y ascendente
tu torso frontal, como si fuera
la franja de la camiseta
de tu equipo de fútbol predilecto.
Se siente el temblor de las chapas
por el viento del norte, un rumor sostenido,
no es difícil imaginar, dos cuadras más abajo,
los camalotes ganando velocidad.
Pasó un auto y creí que se había largado
la lluvia, me confundió.
Si estuvieras despierto, ¿sentirías
cómo nuestros corazones se sincronizan?
Eso no se puede copiar, como sí
copio el ritmo de tu oxigenación
que realmente se complejiza;
de a ratos se te pegan los labios
y al querer salir el aire
pronunciás una P distanciada de otra
p p p
p p
p p
No digo que durmamos siempre como dos
signos de pregunta adosados,
no sé si soportaría una noche entera,
pero quedate así
un rato
sí, no sé, un rato más
un rato.
Pasó otro auto y otra vez
creí que llovía.
Es cuestión de tiempo nomás
de que tu cuerpo repentino adopte
una posición distinta, en la que yo
esté excluida y no pueda intervenir
sin molestar.
When you wake up tomorrow
Lucina Schell
My head is on your shoulder
I’m sideways, you’re not, and my arm
crosses diagonally ascending
your chest, as if it were
the stripe on the jersey
of your favorite soccer team.
The trembling of the roof slates can be felt
from the north wind, a sustained murmur,
it’s not hard to imagine, two blocks down,
the water hyacinths whipping up speed.
A car passed and I thought the rain
had let up, I was mistaken.
If you were awake, would you feel
how our hearts synchronize?
This can’t be copied, like I
copy the rhythm of your breathing
which gets really awkward;
from time to time your lips stick together
and when you want to let out air
you press out a P after a pause another
p p p
p p
p p
I’m not saying we should always sleep like two
connected question marks,
I don’t know if I could take a whole night,
but stay like that
a while
yes, I don’t know, a while longer
a while.
Another car passed and I thought
it was raining again.
It’s a matter of time that’s all
before your sudden body adopts
a different position, in which I
am excluded and can’t insert myself
without bothering you.
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